Estaba muy estresada con todo lo que me pasaba y decidí manejar un rato para liberar mi estrés. Estaba nevando y de la nada sentí un flash golpearme en la cara. Me segó y alterada moví el volante bruscamente. Mi auto patinó subiéndose a la acera lo que causó que el equilibrio de mi coche se perdiera totalmente y empezara a rodar lastimándome el cuello, la espalda y provocándome un fuerte dolor en la lumbar. Me golpee la cabeza contra el vidrio y sentí la bolsa de aire salir.El auto por fin se detuvo y estando de cabeza toqué mi frente y al ver mi mano solo vi sangre. Después todo se tornó oscuro.
Abrí los ojos y al rededor de mi todo era blanco, al principio pensé que era la nieve, pero luego noté que no hacía frío. Traía puesto un vestido blanco con unas sandalias doradas. Era así:
–¿Dónde estoy?– dije en voz alta.
–Bienvenida, (tn)______.– Escuche una voz atrás de mi. Voltee para encontrarme con una mujer de cabello casi blanco, pero brilloso. Un vestido blanco con dorado y tenía alas. Me encontré con un ángel.–Permíteme presentarme, yo soy tu ángel de la guarda. Nosotros no tenemos nombres como los de los humanos, son más como sonidos. En tu idioma mi nombre suena como Graciel.
–Yo, debo estar soñando.
–Quisiera que nos encontráramos en un simple sueño, pero tu experiencia fue cercana a la muerte. Sin embargo aún no te toca morir. El señor dice que aún tienes mucho que hacer en la Tierra.
–¿Ósea que morí?– pregunté.
–No, solo estas inconsciente, y a pesar de que aún tienes cosas que hacer quiero primero hablar contigo sobre tu vida. Yo mejor que nadie sé que fuiste lastimada por Justin.
–No me hables de él por favor.
–Perdón, mi niña amada, como tu ángel lo último que quiero es lastimarte. Pero como tu guía tengo que decirte esto. Él te ama, y en este momento esta en tu cuarto del hospital esperando a que despiertes.
–¿De verdad?
–Si, lleva mucho tiempo haciéndolo, tiempo de tu vida. En esta dimensión no existe el tiempo ni el espacio, lo que ahora te parecen 5 minutos de conversación en la Tierra ha sido un mes. He visto a Justin hablarte y pedirte perdón. ¿Te gustaría verlo y escucharlo?
–Por favor Graciel.
Entonces empecé a escuchar la voz de Justin y lo vi, lo vi ahí sentado en el sillón del cuarto de hospital con lágrimas en los ojos.
–Graciel, no puedo permitirle decir eso.– dije.– Tengo, tengo que volver, tengo que decirle que lo amo.
–Claro mi niña, te acompaño hasta donde está tu cuerpo. Y recuerda, yo te amo y te protejo siempre. Cuando me necesites estoy a tu lado. Abrete a sentirme y a escucharme que yo siempre te hablo y te abrazo.
–Muchas gracias.
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–Jus..... Justin.....– dije con las pocas fuerzas que tenía.–Sí, soy yo (tn)______– me respondió y mis ojos lo empezaron a enfocar. Creo que él estaba llorando
–Prefiero morir ahora, que nunca haberte conocido.– dije con un poco más de voz.
–(tn)_____, estas despierta, no lo puedo creer.– Me dijo, me abrazó y me besó. Un pequeño y rápido beso en los labios.– Lo siento, no sé que me paso.
–No te disculpes, lo extrañaba.– dije.
–Oh por Dios, tengo que llamarle al doctor. ¡Enfermera, Doctor! ¡Está despierta! ¡Ya despertó!– gritaba Justin mientras se salía del cuarto.
Unos minutos después el doctor entró al cuarto seguido de mi mamá, Cameron, Brandon y Cassie.
–¡MI NIÑA DESPERTASTE! ¡GRACIAS DIOS, GRACIAS!– dijo mi madre mientras lloraba y me abrazaba muy muy fuerte.
–Mamá, me quedo sin aire.– le dije.
–Perdón perdón.– me dij y se hizo para atrás.
–Que susto nos sacaste.– dijo Cameron.– Que bueno que ya estas de regreso.
–Bienvenida hermanita.– Me dijo Cassie.– Faith ya te extrañaba mucho, va a estar feliz.
–Sis, que bueno es tenerte de regreso.– dijo Brandon, a él se le escapó una lágrima al abrazarme.
–Perdón por matar el momento.– Interrumpió el doctor.– Pero debemos hacer unos exámenes para revisar que no haya traumatismos y todo este bien. Te diste un buen golpe, jovencita.
–Si claro doctor.– dije mientras intentaba moverme fuera de la cama, pero no lo logré.–No..... ¡No puedo mover las piernas! ¡doctor no me puedo mover!.– sentí pánico y vi el pánico en los ojos de todos. En especial en los de mi mamá y los de Justin. Empecé a llorar de la desesperación. –¡¿POR QUÉ NO SE MUEVEN?!– grité despesperada.
–Me temía que pasara eso, la llevaré a hacer sus estudios. ¡Enfermera una silla de ruedas!– dijo al salir del cuarto.
–Todo va a estar bien.– dijo Justin.
–Tengo miedo.– le dije mientras él me abrazaba.
–Estaré contigo pase lo que pase.– dijo y besó mi cabeza.
–Buscaremos la forma de que vuelvas a caminar.– dijo Cameron.– Lo que se necesite.
–Llamaré a tu padre, mi niña, te prometo que todo va a estar bien.– dijo mi mamá.
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Me hicieron varios estudios, si antes odiaba los hospitales ahora de verdad no quería volver a poner pie en uno. El doctor dijo que me había dado un golpe tan fuerte que había quedado paralítica de la cintura para abajo. Que me podrían hacer terapias pero no podemos tener tantas esperanzas. Lloré por horas al saber la noticia. Mi papá me llamó a los pocos minutos de salir del hospital a mi casa. Me dijo que el iría a visitarme lo más pronto posible junto con mi hermana y Ale.
Elena, Brianna y los demás chicos fueron a visitarme a mi casa.
–Si te hace sentir mejor, tu silla morada está muy linda.– me dijo Elena.
–No, no me hace sentir mejor, pero gracias.– dije molesta.– Mejor cuéntame qué tal ha estado tu tiempo aquí en Stratford.
–Bien, la escuela me gusta. Estoy en todas tus clases como Brianna.Vivo con una familia muy linda a 5 minutos de aquí. Y Ryan y yo...
–Estamos saliendo.– dijo Ryan mientras le tomaba la mano.
–Eso me gusta, me hace muy feliz.– les dije.– ¿Y tú, Brianna?
–Ya sabes, same old same old.– dijo y vi como Sasha se entristecía un poco.
–Bueno chicos, creo que es hora de que (tn)____ descanse.– entró mi mamá al cuarto.
–Claro, nos vemos (tn)______.– dijo Elena.
–Cuidate.– se despidió Ryan.
–Venimos mañana.– agregó Brianna.
Y así todos los chicos se fueron menos Justin.
–¿Te subo a tu cuarto?– me preguntó.
Suspiré– Si, por favor.
Justin me cargó en sus brazos hasta mi cuarto y me acostó sobe mi cama.
–¿Justin, me puedes ayudar a ponerme la pijama?– le pregunté.
–¿Segura?– me contestó.
–Claro, no es nada que no hayas visto.
–Pero, yo... digo... terminamos.
–Bueno, eso se puede arreglar, ¿no?– sonreí.
Sonrió–(tn)____, ¿me harías el honor de volver a ser mi novia?
–Déjame pensarlo...–bromee, pero a él no le gustó la broma pues vi como cambió su mirada.– Claro que sí, Justin.
Me besó y me abrazo.–Gracias, en serio muchas gracias.– se le quebró la voz.
–Just... mi pijama.
Me ayudó a ponerme la pijama. La verdad me sentí muy inútil así que no pude evitar soltarme a llorar.
–Justin, no puedo vivir así. Me voy a volver loca.– dije entre sollozos.
–Mi princesa, te prometo que iré hasta el otro lado del mundo para encontrar la forma de que vuelvas a caminar.– besó mi frente.– Te prometo que todo va a estar bien.
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Chicas espero les guste el capítulo, no olviden comentar y poner su reacción.Gracias por estas 862 visitas. Sin lectores no hay escritor así que ver que visitan mi página me hace pensar que les gusta. Lo confirmaría si más gente comentara pero bueno. Muchas gracias.
Beshos
Callia
No mms, te juro que en este momento estoy llorando horrible, ayyyyy simplemente creo que la última vez que lloré por algo que había leído fue con City of Lost Souls :´)
ResponderBorrarSencillamente no tengo palabras para describirte cuanto amo tu novela, y la forma en la que escribes es asdfdghjkklñ ¡Me encanta! Te juro que mereces este número de visitas y lectores y muchísisimos más, porque un talento como el tuyo debe de ser conocido, te lo digo en serio ;)
Gracias por escribir <3 <3 <3 Te amooo!!
Andy <3