Capítulo 14; el mejor día de mi vida

Al siguiente día me despertó Lucy a las 8:00 am.

–Hermana, dice papá que bajes a desayunar .– me dijo.

–Gracias pulguita, ahorita bajo.

Me costó mucho trabajo levantarme, 10 minutos para ser exactos,  me puse mi bata y bajé a la cocina.

–Buenos días (tn)_______. – me dijo Ale cuando me senté en la mesa.

–Buenos días, –respondí– siento levantarme tan tarde.

–No te preocupes, sé ve que fue un vuelo pesado. ¿Gustas pan francés?

–Si, muchas gracias.

Terminé de desayunar y me despedí de Lucy que ya se iba al kinder. Subí a mi habitación y vi que mi celular brillaba con un mensaje. Era de ayer en la noche de Justin.

Bueno princesa, yo le digo a Ryan que pase por ti a las 10:00am. Te veo mañana.

Dulces sueños.

Justin

A las 10!!!? ¿Qué hora era? Vi mi reloj digital en mi mesita de noche y marcaba las 9:40am

–¡Mierda!¿¡ 20 minutos?!

Me dí la ducha más rápida que me he dado en mi vida, me puse el primer outfit que encontré. Algo como esto

Justo cuando estaba poniendome crema para peinar en mi pelo aún mojado sonó mi celular, era un número desconocido.

-¿Hola?- conteste.

-(tn)_____, Soy Ryan, estoy afuera de tu casa.- dijo desde la otra linea.

-Claro, bajo en dos segundos.- dije y rápido colgue el teléfono. 

Bajé las escaleras rápido, tome las llaves de la casa y cuando estaba abriendo la puerta...

-¿A dondé vas?–dijo mi papá desde la sala.

– A..... casa de Pablo.–conteste.

– ¿Me estas avisando o pidiendo permiso?– dijo con un tono molesto bajando el periódico que estaba leyendo.

–Por favor papá, ¿puedo ir a casa de Pablo?

–Última vez que estas a punto de salir sin pedirme permiso antes.– dijo mientras volvia a subir su periódico.

–Si papá, perdon.

–Y pasa por tu hermana a la 1:15, te mando la dirección de la escuela a tu celular. 

–Pero papá.–me quejé, como le iba a decir a Justin que teníamos que ir a recoger a. Lucía. 

–Tienes que ayudar mientras estes en la casa.Es mi última palabra.

Suspiré– Está bien.– y salí de ahí

Subí al auto donde venía Ryan, era un Audi A3 color rojo cereza.

Ryan traía puesta una gorra y lentes. Rayban oscuros. 

–Hola Ryan, un gusto conocerte.– le dije.

 Este se bajo los lentes oscuros, me miro completa, prácticamnete me comió con la mirada.

–Ese Bieber siempre se gana la mejor mercancía.– dijo– ¿Por qué tardaste tanto?

–Wow, no sabía que Justin podía tener amigos tan mal educados.– fue mi respuesta.

–Amargada.– y condujo el auto.

Todo el camino fuimos en silencio hasta llegar al hotel de Justin. Ahí, como era de esperarse, había millones de. Beliebers afuera cantando y con letreros que decían cosas como “sígueme en twitter" o "te amo" y "aquí esta tu OLLG". Fue gracioso verme del otro lado, pues hace unos meses yo hubiese estado igual. Entramos por la parte de atras del hotel y llegamos a la Suit de Justin, era enorme, adentro tenía hasta cancha de basket. Ryan me dirijió a la sala de la Suit.

–Espera aquí.– me dijo y entró a un cuarto.

–(tn)_______ .– salió Justin de su cuarto con un ramo enorme de rosas.– ¡qué bueno que ya estas aquí, princesa! 

–¡¡Mi amor!!– tomé las flores y se las dí a. Ryan quien venía caminando al lado de Justin. Me lancé a los brazos de Justin y él me abrazó fuertemente. No pude evitar que una lágrima se me escapara de la emoción.

–Mi niña, te he extrañado mucho.– me dijo y luego me dió un suave y largo beso.

–¡Bueno ya! ¡Consíganse un cuarto!– interrumpió Ryan el momento.

Justin y yo solo lo vimos con cara de "muérete" 

–Bueno, ¿lista para ser mi guía turística?– Me dijo con una sonrisa.

–Si, solo una cosa.– dije– Tengo que recoger a mi hermanita a la escuela a la 1:15 de la tarde, así que tenemos que acabar temprano.

–Claro, será lindo conocerla, yo te llevo por ella y las paso a tu casa.

–Gracias, corazón.

****************

Justin me llevó a mi parque favorito. Íbamos caminando y el vendedor de los helados, Marcos, estaba ahí donde siempre. 

–¡(Tn)_____! ¡pequeña! ¡hace meses que no te veo por aquí! seguro que vienes a comprar tu helado de chocolate!

–Si, don Marcos, muchas gracias y también uno de vainilla para mi novio, por favor.

–¡Ahhhh, con que ya con novio!– dijo don Marcos.– Tienes suerte chico, esta niña vale oro.

–Lo sé,– dijo Justin– soy muy afortunado, jamás la dejaré ir.

Sonreí de oreja a oreja y me sonroje.

–Bueno don Marcos, ¿cuánto le debo?

–Cortesía de la casa a mi clienta favorita.

–Muchas gracias.– dije y le puse unas monedas en su bote de propinas.

Justin y yo íbamos caminando comiendo nuestro helado cuando me topé con los columpios a los que solía venir de niña con Elena y Pablo. 

–¿Te empujo?– me preguntó Justin

Corrí sin responder como niña pequeña a subirme a esos columpios que siempre me habían causado tanta emoción.

–Creó que si.– lo escuche decir al acercarse. Estuvimos ahí unos minutos riendo y contándonos cosas de nuestra infancia mientras el me seguía columpiando.

–¿Sabes que es lo que más me gusta de los columpios?– le dije mientras frenaba el columpio.

–¿Qué cosa mi niña?

–Para mí es como volar. Ese sentimiento de que llego alto y toco el cielo, no sé, me gusta… ¿muy cursi?

–Para nada (tn)______ yo así me siento contigo.– Se me acercó y puso su frente contra la mía.–Cada vez que te veo a los ojos, cada vez que escucho tu voz, cada vez que me besas, siento exactamente lo mismo, por eso te amo.

–Justin…– ni siquiera me dijo acabar y me besó, amo cuando me interrumpe de esa manera, es una forma muy tierna de interrumpir.–Justin… ¿qué hora es? 

 –La una en punto, tenemos que irnos.

**************

Recogimos a mi hermana y su cara de sorpresa al ver que Justin Bieber si era mi novio de verdad fue la cosa más graciosa que he visto.

–Pero Lucy, ya quedamos…

–Que ni papá ni nadie debe saber, lo sé. Tu secreto esta seguro conmigo hermana.

–Gracias pulguita. 

Llegamos a la casa y Lucy corrió para entrar, yo me quedé un segundo más para despedirme del modo que es debido de Justin.

–No quiero decirte adios, te quiero volver a ver hoy.

–Pasa la noche conmigo.

–¿Qué?–claro que quería pero me sorprendió que me lo pidiera.

–Si, di que vas a dormir en casa de tu amiga y pasa la noche conmigo.

–Justin yo…

–Por favor,- me interrumpió.– Hace mucho que no estamos solos tu y yo. Solo pido una noche contigo.

Al final accedí, como decir que no a esos bellos ojos que tiene. Él sonrió, esa bella sonrisa suya,  que era diferente a la que desde hace años me enamora, esta era especial, esta era solo para mí.

****************

–Repítemelo una vez más, quieres que te cubra diciendo que vienes dormir a mi casa para poder ir y pasar la noche con Justin.– Elena me dijo con voz de "estas loca".

–Básicamente, sí.

–¿Qué gano yo?

–Te voy a llevar al M&G,¿qué más quieres?

–Los suficientes autógrafos para que los pueda vender y me vuelva rica.

–Hecho.

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Mi papá me dio permiso de ir a "casa de Elena" y me presto su coche, así que metí en mi bolsa la ropa íntima que había comprado en Canadá y me fui al hotel de Justin.

Al llegar todas las luces estaban tenues, había música romántica puesta y pétalos de rosa que hacían un camino que llevaba hasta el cuarto donde dormía Justin. Ahí lo encontré sentado en el sillón, me vio a los ojos con una sonrisa pícara.

–¿Qué son estas horas de llegar, señorita?

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Y… hasta aquí llegamos hoy, ojalá les guste y no me quieran matar por dejarlas en ese punto, prometo que para el domingo ya esta el cap. 15. Sólo que es un fin de semana medio ocupado so........

Este capítulo esta dedicado a mi Parabatai, Andy, espero te haya gustado mucho.

Kisses & Hugs

Callia Klavdianos.